Las curvas del tiempo. In Memoriam

Oscar Niemeyer tituló convenientemente sus memorias como As curvas do tempo. Fueron editadas en 1998, cuando contaba con 90 años. En ellas hace un recorrido por su vida a través de textos breves, pero también de pequeños dibujos incorporados en el margen de las hojas. Bocetos de arquitectura, dónde sus trabajos son fácilmente reconocibles, se alternan con cuerpos tumbados junto al mar, bajo una única línea recta: la del horizonte.

Niemeyer siguió el consejo de su amigo, el historiador del arte Rodrigo Melo Franco de Andrade: «Vete escribiendo, ya lo corregirás después». Comenzó a escribir en los fines de semana, cuando acudía sólo a su estudio a leer, pensar en la vida o, simplemente, observar la playa de Copacabana... eran los días en que más trabajaba.

En el libro apenas se habla de arquitectura, aunque está siempre presente —«Já disse, en outras ocasiões, practicamente tudo o que tinha a dizer»—. En uno de los pocos párrafos que le dedica, comenta «Não desprezo o passado. Ah, como eram grandes os que construíram as pirâmides, as voûtes imensas, as velhas catedrais! Para mim não existe arquitectura antiga e moderna, mas sim, como disse Alvar Aalto, boa e má arquitectura».

Hace pocos días, comentábamos en clase la importancia que tuvo la ciudad de Brasilia para el urbanismo del Movimiento Moderno, proyectada por Niemeyer junto a su maestro Lúcio Costa. Esta noche ha fallecido otro maestro, el mismo que dejó escrito: «O importante é que cada arquitecto faça a sua arquitectura. Sei com que entusiasmo procuramos a solução desejada e com que esperança a concluímos. E isso tem que ser respeitado».

Os proponemos que, a modo de homenaje, comentéis esta entrada con aquellas obras suyas que os hayan parecido significativas.

3 comentarios:

Rubén García dijo...

Se ha marchado un maestro.

http://www.flickr.com/photos/nelbu23/sets/72157627531923294/with/6077544577/

"La vida es un soplo. Todo acaba. Me dicen que después que yo muera, otras personas verán mi obra. Pero esas personas también morirán. Y vendrán otras, que también se irán. La inmortalidad es una fantasía, una manera de olvidar la realidad. Lo que importa, mientras estamos aquí, es la vida, la gente. Abrazar a los amigos, vivir feliz. Cambiar el mundo. Y nada más."

Iván Cuellas dijo...

Se ha ido uno de los padres de la arquitectura brasileña, pero siempre nos quedarán sus obras y sus grandes frases:

“No es el ángulo recto que me atrae. Ni la recta, dura, inflexible, creada por el hombre. Lo que me atrae es la curva libre y sensual. La curva que encuentro en las montañas de mi país. En el curso sinuoso de sus ríos, en las olas del mar, las nubes del cielo, el cuerpo de la mujer preferida. De durves está hecho todo el universo. El universo curvo de Einstein”

Y una de sus obras que más me ha gustado:

http://es.wikiarquitectura.com/index.php/Catedral_de_Brasilia

Unknown dijo...

“No quiero cambiar la arquitectura, lo que quiero cambiar es esa
sociedad de mierda.”
“La arquitectura es una cuestión de sueños y fantasías, de curvas
generosas y de espacios amplios y abiertos.”
“La vida es un soplo. Todo acaba. Me dicen que después que yo muera,
otras personas verán mi obra. Pero esas personas también morirán. Y
vendrán otras, que también se irán. La inmortalidad es una fantasía, una
manera de olvidar la realidad. Lo que importa, mientras estamos aquí, es
la vida, la gente. Abrazar a los amigos, vivir feliz. Cambiar el mundo. Y
nada más.”
“Soy un ser humano insignificante. Basta mirar al cielo para sentir que
somos muy pequeños. Creo que el ser humano debería ser más sencillo,
más modesto. Sentir placer en ayudar al otro. Sentir placer de participar
en la lucha por un mundo mejor, más justo, sin miseria, sin
competitividad.”
“Cuando la vida se degrada y la esperanza huye del corazón de los
hombres, la revolución es el camino a seguir.”
http://2.bp.blogspot.com/-qttfoZ1i2hY/ULhlUrzH52I/AAAAAAAADMM/H0Yw5eMMmVI/s1600/eamotrildecoracion.07.jpg